Kenneth Smith es un asesino convicto de 58 años cuya inyección letal de 2022 fue cancelada en el último minuto porque las autoridades no pudieron conectar una vía intravenosa.
Alabama planea colocar una máscara respiratoria de tipo industrial sobre la cara del condenado y reemplazar el aire que respira con gas nitrógeno puro, lo que provocará su muerte por falta de oxígeno.
Esta es la primera vez que se utiliza este método de ejecución en Estados Unidos.