Colores, cortes y tipos de telas es lo que se debe considerar al momento de adquirir una prenda de vestir. Esta simple práctica podrá permitirnos tener un armario con prendas básicas de fácil combinación y adaptables a cualquier ocasión. Un par de pantalones, jeans, un blazer, un vestido, un buen abrigo, todos en colores neutros, será una gran elección. Tampoco se debe dejar de lado a los accesorios, piezas indispensables para resaltar un outfit.