Las instalaciones fueron equipadas con 54 nuevas cámaras lectoras de placas de vehículos y 22 cámaras móviles de 360 grados.
Este proyecto contó con una inversión de 5.5 millones de dólares, contribuyendo a la identificación automática de vehículos con reporte de robo y reforzará el circuito de vigilancia distribuido en San Salvador y La Libertad, haciendo un total de 448 cámaras distribuidas en nueve distritos.