En la demanda argumentan que no es muy distinta a una acción propuesta durante la presidencia de Donald Trump, que fue bloqueada por los tribunales.
La demanda, presentada por La Unión Americana de Libertades Civiles, y otros organismos es la primera prueba sobre la legalidad de las amplias restricciones de Biden en la frontera sur, las cuales se produjeron luego de meses de deliberaciones internas en la Casa Blanca.