Decenas de pescadores artesanales del Puerto La Libertad regresaron al mar tras la desactivación de la máxima alerta por lluvias en todo el país. Los trabajadores, que en su mayoría tienen a este oficio como único medio de sustento diario, tuvieron que esperar siete días para ingresar al mar. La poca venta de productos marinos es uno de los efectos de los días de emergencia, pero se espera que se normalice durante la semana.