Paul Pogba, centrocampista de Juventus y la Selección de Francia, confesó sentirse dijo que estaba "triste, conmocionado y desconsolado" tras ser suspendido del fútbol a causa de un delito de dopaje. El exjugador de Manchester United recibió el jueves una pena de cuatro años, según los informes que trascendieron desde Italia.
El jugador de 30 años fue sancionado provisionalmente en septiembre por el tribunal nacional antidopaje de Italia después de haber dado positivo por testosterona, luego del partido de la Serie A contra Udinese, el 20 de agosto, en el que fue suplente pero no saltó al campo de juego.
Después de que el organismo antidopaje italiano Nado confirmara el resultado positivo en una segunda prueba en octubre, ahora se produce la suspensión de cuatro años solicitada por la fiscalía.
El campeón del mundo con el seleccionado galo en Rusia 2018 respondió a esta noticia mediante una declaración en las redes sociales al afirmar que "nunca he tomado, consciente o deliberadamente, ningún suplemento que viole las normas antidopaje".
También dijo que presentará un recurso de apelación ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo contra la prohibición impuesta. En su cuenta de Instagram, Pogba señaló: "Hoy me han informado de la decisión del Tribunale Nazionale Antidoping y creo que el veredicto es incorrecto".
Y continuó en cuanto a sus sentimientos: "Estoy triste, conmocionado y desconsolado porque me han quitado todo lo que he construido en mi carrera como jugador profesional. Cuando esté libre de restricciones legales, la historia completa quedará clara, pero nunca he tomado, consciente o deliberadamente, ningún suplemento que viole las normas antidopaje.
Además, Pogba quiso aclarar: "Como deportista profesional, nunca haría nada para mejorar mi rendimiento mediante el uso de sustancias prohibidas y nunca he faltado el respeto o engañado a otros atletas y seguidores de ninguno de los equipos con los que he jugado o contra los que he jugado. Como consecuencia de la decisión anunciada hoy, recurriré ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo".
El centrocampista francés se convirtió en el futbolista más caro cuando se mudó a Manchester United procedente de la Juve por 105 millones de euros en 2016. El nacido en Lagny-sur-Marne ha aparecido con moderación desde que regresó a Turín después de una serie de reveses por lesiones, con sólo seis apariciones en la Serie A la temporada pasada y dos en esta temporada.
Foto: Jonathan Moscrop/Getty Images