Indican que la modificación en cuestión debilita el carácter democrático del sistema constitucional del país y evidencia el predominio del interés de perpetuarse en el poder.
Según las organizaciones, el artículo 248 es parte esencial de las llamadas cláusulas pétreas y, con la reforma, los diputados se agencian el poder de manipular la constitución en una sola legislatura, con lo cual consideran que le quitan el poder a la ciudadanía a decidir con su voto.