Estas cianobacterias filamentosas cubren la superficie del agua, como parches, afectando la calidad del agua y produciendo mal olor.
Se recomienda evitar actividades recreativas que impliquen inmersión en el lago. Todas sus playas no son aptas para el baño, especialmente para las personas con piel sensible.
Las altas temperaturas y alta radiación solar, combinadas con los nutrientes que se encuentran en el agua, provocan que las cianobacterias proliferen, así como la pigmentación en el agua, por lo que se mantiene de un tono marrón y verde oscuro.