Ya lo peor parecía haber pasado, pero Manchester City volvió a dejar puntos en el camino en la Premier League. Lo ganaba por 2-0, y Crystal Palace se lo empató 2-2 por la fecha 17 en el Etihad Stadium por lo que quedó relegado a la cuarta posición y Liverpool se puede escapar.
Después de un primer tiempo de lujo, en el que generó una gran cantidad de situaciones, el equipo de Pep Guardiola apenas pudo romper la paridad con un gol de Jack Grealish. Para el complemento recién logró ampliar la diferencia, pero un descuido puso suspenso hasta el final.
La primera la tuvo Julián Álvarez mediante un cabezazo de pique al suelo tras un centro de Kyle Walker que el arquero rechazó sobre el palo derecho. Poco después, Rodri también se lo perdió luego de un pase atrás de Rico Lewis que conectó, pero rebotó en Marc Guehi y salió.
Hasta que una buena asociación colectiva derivó en una asistencia de Phil Foden para que Grealish, dentro del área, defina de derecha al ras del suelo contra el poste izquierdo pese al esfuerzo de Dean Henderson para evitar el primer tanto y desató la euforia en el estadio.
A partir de allí, la cancha se inclinó por completo. Joško Gvardiol pudo haber estirado la ventaja en dos ocasiones, pero el arquero y luego la mala puntería se lo impidieron. Foden también intentó, pero su tiro se marchó apenas afuera. Y antes del final hubo una alarma.
Ederson cometió una falta fuera del área y Michael Olise se encargó de su ejecución. El balón salió apenas arriba del travesaño, pero en el complemento la visita no perdonó en su única aproximación. Antes, los Citizens lograron poner el segundo en la cuenta en Mánchester.
Álvarez había marcado primero mediante un tiro libre, pero el árbitro lo anuló por la intervención en el camino de Rodri, quien se agachó para no tocar la pelota e interfirió en la tarea del arquero. Pero rápidamente, Lewis apareció para definitivamente estirar el resultado.
Grealish inició la jugada de izquierda al centro, tocó para Foden, que alcanzó a desviar, y el balón suelto le permitió a Lewis rematar de derecha dentro del área para dejar sin posibilidades a Henderson contra el palo derecho. Y luego, casi llegó el tercero para el City.
Precisamente, Bernardo Silva sacó un tremendo remate a colocar con su zurda que el arquero despejó con una enorme atajada sobre el ángulo derecho. Eso le dio vida al conjunto del Sur de Londres, que aprovechó un contragolpe letal para achicar la diferencia en el marcador.
Un balón largo desde la defensa le permitió a Jeffrey Schlupp ganar las espaldas de la defensa, se filtró en el área y jugó un pase paralelo lejos de las manos de Ederson para que Jean-Philippe Mateta se arroje al suelo y ponga el 1-2 parcial, aunque no era lo último.
Con el tiempo cumplido, las Águilas no se dieron por vencidas y sacaron provecho del cese en la intensidad del local. De hecho, Foden le cometió una dura infracción a Mateta y el árbitro cobró penal. Olise lo cambió por gol con un sutil remate cruzado y consiguió el empate.
Ya no había más por hacer, Manchester City sumó solo un punto y no pudo quedar como escolta de Liverpool, que podrá sacarle seis unidades si gana su partido. Tendrá que dar vuelta la página porque el martes enfrenta a Urawa Reds por las semifinales del Mundial de Clubes.
Foto: Shaun Botterill/Getty Images