Densas columnas de humo se elevaron en la Catedral Metropolitana de San Salvador, encendiendo las alarmas de socorristas quienes se abrieron paso para atender la emergencia.
Se trataba de un incendio generado en la bodega del templo católico donde se guardaban las estructuras utilizadas para la Transfiguración del Divino Salvador del Mundo, socorristas y feligreses que se encontraban en el momento del siniestro, trabajaron para sofocar las llamas que amenazaban con afectar a negocios aledaños.
El fuego habría iniciado debido a un corto circuito; sin embargo, el Cuerpo de Bomberos no confirmó esa hipótesis, una persona fue atendida por inhalación de humo.
Y ante la pregunta de si la iglesia contaba con extintores y medidas de seguridad contra incendios, bomberos se negó a responder.
Por otro lado, fue necesaria la evacuación preventiva de personas que se encontraban en los negocios aledaños para evitar una tragedia, algunos de ellos narraron cómo vivieron esos instantes.
Los daños tras este incendio no han sido cuantificados al menos 40 personas trabajaron en evitar que las llamas se propagaran.