El día de esta familia comienza seleccionando cartones, los mismos que días antes consiguieron en diferentes puntos de Sonsonate, podemos decir que son desechos que en manos de Carlos Aguilar se transforman en interesantes maquetas, autobuses, furgones, camiones y hasta estadios elaborados de puro cartón, claro, utilizando ingenio al máximo.
El taller de cartón, así le dicen muchos a este emprendimiento ubicado en el cantón Los Mangos de Nahuizalco en Sonsonate, Carlos Aguilar comenzó con todo esto hace algunos meses ante la falta de oportunidades y necesidades que solventar, es cabeza de hogar y tiene dos hijos por quienes se rebusca de esta manera.
Los cartones que recolecta son trazados, se cortan en piezas que simulan la carrocería de los vehículos, luego cada una es decorada con papel de color o pintura y se procede al ensamblaje, poco a poco se logra lo deseado, en cuestión de uno o dos días el resultado.
Carlos tiene ingenio, talento para estas maquetas dicen sus vecinos, quienes lo admiran por la ocurrencia que tuvo para generar ingresos.
Por su parte, el padre emprendedor dice que todo comenzó porque en su hogar hubo un tiempo que no tenían nada, se vio acorralado y no dejaría que su familia siguiera sufriendo, fue así como se animo a elaborar carritos de cartón, oficio que le permite generar ingresos sobre todo para cumplir sus responsabilidades como padre, punto de gran importancia para él.
Su esposa trabaja pero lo que gana no es suficiente ante las responsabilidades, por eso él no se quedo de brazos cruzados y aunque dice que algunos vieron de menos su idea ahora es lo que le permite cumplir como un verdadero papá, para sus hijos Carlos es un héroe, es un hombre ejemplar y por eso valoran todo lo que hace, incluso se han animado a ayudarle en algunos pedidos porque saben que el resultado del trabajo a todos les conviene.
Palabras que motivan al emprendedor, al hombre que hace mini vehículos de cartón demostrando que ser padre responsable es posible cuando se desea, él lo está logrando a pesar que muchas puertas se le cerraron, pero la creatividad y la necesidad lo llevaron a recolectar desechos para convertirlos en estas replicas que hoy en día le permiten sacar delante de manera honrada a sus hijos.