La gastronomía salvadoreña cuenta con una amplia variedad de platillos a pesar de su poca extensión territorial de 21,041 km², pero a pesar de las distancias, los platillos cambian por área geográfica, una de las diferencias más marcadas se encuentran las recetas que se preparan en oriente y la parte central del país a continuación exploraremos parte de la gastronomía que gusta a muchos y a otros no tanto.
Ada Ortiz tiene tres décadas cocinando y ofreciendo a sus clientes algo que es difícil de encontrar en San Salvador, tortas de pescado envueltas en masa, si en masa, contrario a las envueltas en huevo, más populares en la zona central del país, Ada dice que la receta proviene del oriente del país, gracias a la herencia de su abuela que le dejó el característico toque migueleño.
Pero, ¿entonces cómo se preparan en el resto del territorio? En la zona central y occidental de El Salvador, durante la cuaresma la tradición es preparar el pescado envuelto únicamente en huevo, siguiendo los pasos de la receta.
El chef Guillermo Salazar asegura que las culturas hondureña y nicaragüense influenciaron culinariamente la mayoría de departamentos del oriente salvadoreño.
¿Por qué existe esta diferencia gastronómica en un país tan pequeño? Según el historiador Ricardo Castellón, en el pasado el río Lempa estableció un límite territorial significativo, ocasionando que distintos grupos étnicos se ubicaran en el oriente se encontraban los Lencas y Los Kakawiras, y basaron sus recetas alimenticias en el maíz, producto agrícola que tenía una mayor producción en esa zona.
Con el paso del tiempo, estas recetas ancestrales fueron heredándose entre las familias, catalogándose como un distintivo cultural de la zona oriental del país, sin llegar completamente a la parte central.
Sin embargo, esta práctica cultural empezó a migrar al resto del país por efecto de la movilidad de la población y presentándose historias como la de Ada Ortiz, quien mencionó que ya enseña a sus nietos está tradición y manera de preparar el platillo para mantener viva esta receta migueleña en la capital de El Salvador.