En lo que va del año más de 800 conductores peligrosos han sido detenidos en los controles que ejecutan las autoridades de tránsito en las carreteras del país, es decir más del 46% que el año pasado en este mismo periodo, superando las más de 30,000 pruebas de antidoping.
El más reciente de este tipo de controles se instaló sobre la alameda Manuel Enrique Araujo en donde se realizaron 70 pruebas de grados de alcohol por aire espirado.
Siendo un conductor el único en dar positivo a su prueba con 175 grados de alcohol, el sujeto fue detenido y puesto a la disposición de las autoridades.
El delito de conducción peligrosa en El Salvador es castigado con prisión de 4 a 6 años y en caso de ser un conductor del transporte público la pena incrementa hasta los 8 años.