La revisión de los neumáticos, frenos, luces, y escobillas del parabrisas, junto con la verificación de los sistemas eléctricos y niveles de líquidos, son pasos esenciales para prevenir accidentes y problemas mecánicos. Además, ajustar tu estilo de conducción a las condiciones climáticas, como reducir la velocidad y aumentar la distancia de seguridad, es crucial para evitar incidentes en carreteras mojadas. Con estos cuidados, puedes enfrentar la temporada de lluvias con mayor confianza y seguridad al volante.