Se cumple un año desde el anuncio que hizo Nayib Bukele como presidente de El Salvador en cadena nacional de la habilitación del centro del confinamiento del terrorismo, un nuevo centro penal construido para recluir a miembros de estructuras criminales que eran capturados durante el régimen de excepción.
Fue construido en el municipio de Tecoluca, departamento de San Vicente, en un terreno de 236 manzanas y con una capacidad para 40,000 reos.
Según lo anunciado por las autoridades, el Cecot cuenta con pabellones para confinamiento de reos, casa para perros guardianes, edificio de custodios, control de acceso con escáner de cuerpo completo, escáner paquetero y arco metálico, fábrica para 64 talleres: pintura, pupitres, textilería, administración y almacén de armas y equipos de seguridad, entre otros.
Muchos reos recluidos en el Cecot aún tienen procesos judiciales en desarrollo y las audiencias se realizan de forma remota, desde un salón ubicado en ese lugar, para que no sea necesaria la movilización del acusado.
La construcción de esta infraestructura es parte de la estrategia implementada por el gabinete de seguridad para combatir a las pandillas, junto con el régimen de excepción y el plan control territorial.