Amortiguar el impacto económico que generan desastres naturales y emergencias de salud en el país, es el objetivo de un nuevo préstamo que fue otorgado a El Salvador, por parte del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que asciende a un monto de $400 millones de dólares.
El proyecto busca incrementar la resiliencia financiera frente a eventos naturales y emergencias de salud pública.
El préstamo fue otorgado bajo la facilidad de crédito contingente para emergencias por desastres naturales y de salud pública de esta entidad internacional.
El programa está dividido en un préstamo por $300 millones de dólares bajo la modalidad 1, para terremotos y ciclones, y $100 millones de dólares bajo la modalidad 2, por posibles erupciones volcánicas y brotes sanitarios.
El Salvador se une a los 15 países de la región a los que el BID ya otorgó préstamos para este rubro, que brindará herramientas de respuesta inmediata ante emergencias, incluyendo actividades de asistencia humanitaria, rehabilitación de servicios públicos, entre otros.
El préstamo por $400 millones de dólares tendrá un plazo de pago de 25 años, con un período de gracia de 5 años y medio, además de una tasa de interés basada en libor (London Interbank Offered Rate) una tasa de interés determinada por las tasas que los bancos, que participan en el mercado de Londres, se ofrecen entre ellos para depósitos a corto plazo.