Estos son algunos vegetales cosechados por pedro, un agricultor del municipio de Tacuba en Ahuachapán, vivir en el corredor seco salvadoreño, se vuelve difícil para los productores, el cambio climático es un enemigo silencioso que complica la vida a cientos de familias, ellos buscan salir adelante con ayuda de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura a través de sus proyectos clave.
El programa educa a estas personas para aprovechar sus parcelas adaptándolas ante el alza de temperaturas, las pérdidas de pedro habrían sido mayores de no tener este apoyo.
La FAO ha invertido durante 5 años más de 125 millones de dólares en estas prácticas, beneficiando a más de 50,000 agricultores en el país y restaurando ecosistemas que se creían perdidos.
En 2023, la temperatura de la tierra incrementó 1.5 grados más, convirtiéndose en el año más caluroso de toda la historia, este tipo de proyectos son clave para la sobrevivencia de decenas de salvadoreños, y para evitar que las familias caigan en crisis alimentaria.