El gobierno se jugó su última carta en el tema de pensiones, para no caer en impago en octubre. Tras la reunión de la comisión de Hacienda, en medio de la sesión plenaria, se acordó que se reformaría la Ley de Fideicomiso de obligaciones previsionales. Es decir, el Ejecutivo podrá cancelar con certificados los 71,5 millones de dólares a más de cien mil pensionados.