En las afueras de San Vicente específicamente en el cantón La Hoya se encuentra una peculiar granja, pero no es de las que estamos a costumbrados a ver, lo que encierra estas laminas son centenares de garrobos e iguanas de gran tamaño, donde son criados para la comercialización y consumo humano.
Hace unos 15 años llego un proyecto de una ONG a la zona, orientado a un zoo criadero de iguanas, con el objetivo de que las familias más pobres de este lugar pudieran tener ingresos económicos, así como para la evitar la depredación que existía en ese momento para estos reptiles.
Zulma es la única que continúa trabajando y manteniendo a flote este singular lugar.
La alimentación es importante cada dos días se les coloca una arroba de concentrado especialmente para la especie en los comideros, también de vitaminas y se desparasitan con el objetivo de tenerlas en buena condición, los precios rondan entre 35 a 65 dólares.
El terreno donde se encuentran los garrobos y las iguanas cuenta con unos 25 de ancho por unos 40 metros cuadrados, la tela ciclón funciona como techo el objetivo de evitar que algún otro animal las pueda atacar, otro dato importante es que de cada 100 que nacen, un porcentaje de ellas van a la reserva natural de la zona.
Actualmente el recinto se encuentras unas 700 iguanas entre machos y hembras, en el futuro se espera construir otros espacios donde se puedan separar para tener un mayor control de la especie.
La venta de iguanas en El Salvador está sujeta a regulaciones y prohibiciones, y quienes participen en esta actividad pueden enfrentar sanciones legales, no así cuando son reproducidas en granjas especializadas.