El Salvador fue el segundo país centroamericano que más asesinatos de mujeres registró en 2022, así lo revela el informe sobre violencia feminicida publicado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe.
La Cepal da cuenta de 53 víctimas de las cuales 16 eran mujeres de entre los 30 a 44 años, 14 eran jóvenes de 15 a 29, otras doce rondaban las edades de 45 a 59 años y once más eran adultas mayores de 60 años o más. Mientras que el primer país con más feminicidios fue Guatemala con 91 asesinatos, en su mayoría de jóvenes de entre los 15 a 29 años.
Otro dato alarmante es que, en El Salvador de las 53 muertes violentas de mujeres, 36 de ellas eran víctimas no salvadoreñas, es decir extranjeras, sin embargo, la tasa de feminicidios por cada 100, mujeres ha ido disminuyendo en nuestro país en los últimos cinco años; pues en 2019 las cifras eran de 3.9 muertes por cada 100,000 mujeres, en 2020 fue de 2.2 asesinatos, en 2021 volvió a crecer a una tasa de 2.4 víctimas y en 2022 decreció hasta las 1.6 muertes.
Por otro lado, Nicaragua es el único país centroamericano que tiene las tasas más bajas de feminicidios que no superan ni el punto porcentual; pues este país solamente reporta las muertes de mujeres ocasionadas por sus parejas o exparejas, y no por crímenes violentos.
Cabe señalar que el año pasado en El Salvador un 37.7% de las mujeres asesinadas tenían o habían tenido una relación de pareja con el agresor, no así en Costa Rica donde este porcentaje se eleva a 63.2 o en panamá donde llegó al 57.1%.
El informe también detalla que, en siete países, entre ellos Guatemala, Costa Rica, Nicaragua y Panamá, los feminicidios de mujeres mayores de 60 años fueron del 8%, pero en El Salvador se registró un 21%; lo que obliga a poner atención a estas muertes en un contexto de envejecimiento y de violencia de género hacia mujeres mayores afirma la Cepal, una situación grave la cual comúnmente es normalizada e invisibilizada según el organismo.