Tras el rechazo que provoco en Argentina el envío de un megaproyecto al congreso para cambiar la legislación vigente en materia económica, fiscal, electoral, social y de seguridad, el gobierno del ultraliberal Javier Milei afirmó que la iniciativa apunta a que el estado argentino deje de molestar a los ciudadanos.
Constitucionalistas de distintas corrientes y gran parte de la oposición calificaron de amenaza el documento que contempla la división de poderes, una reforma electoral, endurece las penas contra las protestas callejeras y propone una amnistía fiscal.
El proyecto aún no ha sido aprobado y se discutirá en el periodo de sesiones extraordinarias que se extenderá hasta marzo.