Aplicar una especie de régimen de excepción a la seguridad vial es la propuesta de Saúl Castelar, viceministro de Transporte para reducir la violencia con las que se conducen los automovilistas en el país y por lo que han impuesto más de 183,000 multas durante este año, el 10% al trasporte público, es decir 19,000 esquelas, siendo las principales causas el manejar a excesiva velocidad, no portar documentación requerida y conducir unidades en mal estado.
Situación preocupante para las autoridades debido a la responsabilidad que implica el trasportar diariamente a cientos de personas y las consecuencias que se tienen si uno de esos buses o microbuses se ve involucrado en un accidente de tránsito, que podrían terminar en el retiro de permisos.
Ante el impago de las multas en este sector, el funcionario detallo que dentro de las reformas a la ley de transito que se encuentran en la Asamblea Legislativa y que espera sean aprobadas antes de finalizar el año se contemplan abrir procesos penales para quienes acumulen grandes cantidades de infracciones sin cancelar.
Sobre los hechos ocurridos recientemente, que involucra a conductores que circulaban en sentido contrario, el viceministro dice que se han impuesto más de 5,000 multas por esta falta y menciona que teniendo en cuenta todo lo anterior busca incrementar las sanciones.