Durante el año 2022 se realizaron 61,300 capturas en el marco del régimen de excepción, lo que aumentó aún más el hacinamiento carcelario y al cierre del año anterior, superó el 306% de sobrepoblación, según los datos brindados por el Observatorio Universitario de Derechos Humanos, por lo que la construcción del centro de confinamiento del terrorismo podría ser una medida para redistribuir la población carcelaria, partiendo de que tiene una capacidad de albergar a 40,000 reos.
Hasta diciembre, el sistema judicial decretó la detención provisional de 53,156 personas y se realizaron 110 audiencias masivas en las que se procesaron a 19,253 imputados y solo a 12 de ellos se le impusieron medidas sustitutivas a la detención.
El informe sobre el estado de los derechos humanos en El Salvador también detalla que las muertes al interior de las cárceles superan las 100.
Por otra parte, el observatorio sostiene que, debido a las detenciones del régimen de excepción, incrementó la cantidad de las solicitudes de habeas corpus presentadas ante la Corte Suprema de Justicia.
Con la implementación del régimen de excepción, el Instituto de Derechos Humanos de la UCA, ha documentado 628 casos de detenciones que señalan como arbitrarias.