Se trata de personas que pertenecen a pueblos originarios de todo el país, se reunieron en Izalco para hablar sobre sus derechos, participación en la creación de políticas públicas y como el estado debe garantizar su inclusión en las decisiones que no los marginen, elaboraron un documento con diversas peticiones.
Según Alex Tepas, miembro del concejo ancestral de los comunes de los territorios indígenas, asegura que no tienen interés alguno en pertenecer a un partido político o de estar involucrado en uno de ellos.
En el escrito dejan plasmado que las comunidades indígenas puedan elegir sus propias autoridades, a la vez que el gobierno pueda crear un fondo para apoyarlos.
Dos siglos llevan estas personas alejadas de los beneficios de otros grupos, salir de la marginación ha sido parte de su lucha, pero una batalla que parecen estar perdiendo, pues temen desaparecer sin ser escuchados. En el censo nacional que se elaboró en 2007, reveló que en el país quedaban menos de 11,000 personas que reconocen ser parte de los pueblos originarios, 16 años después se desconoce si ese número disminuyó, se mantiene o incrementó, sin embargo, esperan que se respete su autonomía y la cosmovisión de sus ancestros.