Él es Marvin Alexander, un niño de un año y 3 meses de edad, quien hace unos días fue sometido a una cirugía de corazón abierto, una compleja operación que necesita muchos recursos para realizarse, esto fue posible tras el equipamiento de equipo especializado en el hospital de Niños Benjamín Bloom.
En el sector privado de salud estas cirugías rondan los 30,000 dólares y en el sistema público antes se realizaban con equipos alquilados y para obtener un turno se demoraba mucho tiempo.
La inversión se estima en 1.3 millones de dólares y ya se envió a 4 perfusionistas y 2 cirujanos al extranjero para capacitarse en el uso del nuevo equipo, que permitirá que el hospital de niños Benjamín Bloom pueda realizar cirugías de corazón abierto y corregir afecciones congénitas como agujeros entre las cavidades del corazón, entre otros procesos relacionados con ese importante órgano del cuerpo humano.