En San Lorenzo, Ahuachapán, un joven lucha por convertirse en licenciado, pero ante la falta de recursos económicos decidió emprender.
Es una nueva jornada de trabajo, a las 7 de la mañana en esta casa todos están levantados para preparar la venta del día, tamales.
Es un emprendimiento que cualquiera podría pensar arranco este par de mujeres pero no es así, todo nació por una idea de Herbert Osorio, un joven de 19 años residente en el cantón San Juan Buena Vista de San Lorenzo, Ahuachapán.
Herbert tiene sueños, quiere ser un profesional pero la falta de recursos económicos lo llevo a elaborar tamales, apoyado por su mamá y una hermana, así logra reunir cada mes lo necesario para sus estudios universitarios.
Herbert ha logrado una gran habilidad, una vez por semana prepara aproximadamente 200 tamales para obtener de ganancia cerca de $15 dólares, suena poco pero es la única manera que ha encontrado para seguir luchando por su sueño profesional.
En horas de la tarde cuando los tamales están listos también se encarga de salir a repartirlos, es decir es el encargado de venderlos en distintas colonias del mismo cantón y lo hace recorriendo a pie varios kilómetros.
Estudia licenciatura en administración de empresas, por eso es admirado en todo lugar donde pasa, sus vecinos y familiares aseguran que es un joven ejemplar, logro vencer el que dirán para luchar día a día.
Herbert asegura que ha tratado de encontrar un trabajo que le permita ganar más pero hasta la fecha la oportunidad no aparece, por el momento promete que seguirá recorriendo las calles del cantón San Juan Buena Vista vendiendo tamales de pollo con el fin de seguir costeando sus estudios universitarios, estudios que lleva con excelentes calificaciones.
