Más de 2 millones de personas habrán emigrado de los países del norte desde El Salvador, Guatemala y Honduras tanto dentro de la región como fuera de ella.
Desde el año fiscal 2018, hasta el año fiscal 2021, una media de 377.000 migrantes ha abandonado estos países cada año, dirigiéndose la mayoría hacia los Estados Unidos, sin embargo, la cifra es preocupante porque la niñez constituye el 25% de las personas en movimiento en América Latina y el Caribe.
En 2022, cerca de 250.000 migrantes, de los cuales unos 40.000 eran niños, niñas y adolescentes, cruzaron la selva del Darién, en los primeros seis meses de 2023, más de 196.000 inmigrantes han cruzado, entre ellos más de 40.000 niños, niñas y adolescentes.
En el transcurso del año fiscal 2022, la oficina de aduanas y protección fronteriza de los Estados Unidos reportó encuentros con más de 541.000 migrantes de países del norte de América Central en la frontera sur; esto incluyó a más de 140.000 niños, niñas, adolescentes y familiares, de esta cifra, 114.585 eran menores no acompañados.
En la actualidad, el grupo más numeroso de niños, niñas y adolescentes migrantes está conformado por menores de 11 años, que representan hasta el 91% de los niños y niñas desplazados en algunos puntos de tránsito clave.