La baja participación de votantes se replicó en varios centros de votación del área metropolitana, la cantidad de salvadoreños que acudieron a emitir el voto en algunas Juntas Receptoras de eran mínimas, por lo que las personas no tenían que hacer fila o esperar ya que estaba vacío.
Algunos observadores electorales consideran que son varias razones por las que en estos comicios se redujo asistencia de los electores.
Otro dato que reportaron las observadoras electorales fue la disminución de la participación de jóvenes.
Los salvadoreños que asistieron a votar consideran que la baja participación se debe al descontento y la poca confianza que tiene la población en los partidos políticos.
En las elecciones presidenciales y legislativas, solo votó el 52.6% del padrón electoral, es decir que el 47.4% no acudió a las urnas, un nivel elevado de ausentismo.