Así lucen las noches en la colonia Las Margaritas de Soyapango, una residencial que por años fue reconocida por la violencia y las pandillas, en la que ahora se respira mayor libertad según afirman sus habitantes; como es el caso de don Raúl Ramírez, quien se encontraba disfrutando de un partido de fútbol y recordó cómo era vivir años atrás en este lugar.
Los grafitis de las pandillas fueron cambiados por arte urbano que ahora adornan varias paredes de esta colonia, mientras que en las calles se ha vuelto común ver a personas paseando de noche a sus mascotas, platicando en el parque y a los niños practicando algún deporte.
Los jóvenes aseguran que el clima de seguridad en el lugar, tras el régimen de excepción, los estimula a pedir que se mantenga la medida.
En la residencial aún se mantiene la presencia de militares quienes patrullan y custodian los principales puntos de acceso, pasajes y espacios públicos, tareas que son acompañadas por elementos del Cuerpo de Agentes Metropolitanos quienes brindan seguridad a las familias.