Ayala ha sido identificado como el segundo al mando de la pandilla que opera en El Salvador, es investigado por los delitos de homicidio y se le relaciona con otros ilícitos como robo agravado, uso de documentos falsos, portación de armas de guerra, desorden público, entre otros crímenes cometidos en tierras estadounidenses, sin embargo, Ayala ya había sido detenido en El Salvador en el año 2020.