Las llamas consumían este puesto de venta de pólvora, mientras tanto los bomberos sofocaban el incendio y cuerpos de socorros atendían a las personas que resultaron heridos, por fortuna todo era parte del simulacro que se realizo en Soyapango, en el que los conocimientos de bomberos y socorristas se pusieron a prueba.
Ante este tipo de emergencias, las entidades de socorro saben que el tiempo es clave y fundamental para salvar vidas, en especial cuando de incendios se trata y esperan que las municipalidades mantengan activos sus protocolos de inspección en las ventas de pólvora.
Durante el simulacro, el director de Fosalud también hizo énfasis en la responsabilidad con la manipulación de pólvora en especial en menores de edad, además de continuar con las medidas de bioseguridad ante el covid-19 y evitar las aglomeraciones de personas durante las fiestas de fin de año.