Agustine es el nombre del proyecto en honor a una educadora francesa que en 1879 fundo el colegio normal de señoritas en El Salvador, marcando un hito en la formación docente del país, inspirado en su legado, este proyecto busca prevenir la violencia en las zonas más vulnerables a través de políticas educativas transformadoras.
La iniciativa fue impulsada por la Unión Europea, el Ministerio de Educación, y Unicef, la cual incluye acciones como la enseñanza de habilidades para la resolución de conflictos, el fortalecimiento del bienestar psicológico y emocional de los estudiantes y la implementación de políticas de equidad e igualdad en los centros educativos. Estas medidas buscan convertir las escuelas en espacios libres de violencia.
Con una inversión de 17.7 millones de dólares, el proyecto Agustine busca llegar a 100,000 estudiantes y 5,000 educadores de las zonas más vulnerables del país.