Durante la temporada de lluvias, es habitual que las autoridades, como Protección Civil, emitan alertas climáticas que se categorizan mediante códigos de colores, desde el verde hasta el rojo. Estas alertas indican el nivel de peligro o riesgo que las condiciones meteorológicas representan para la población, sin embargo, surge la pregunta: ¿cómo actúan realmente las instituciones de primera respuesta ante estas alertas y qué medidas implementan para proteger a los ciudadanos?
Además, dentro de estas existen las alertas estratificadas, en puntos específicos donde el riesgo es mayor, por ejemplo, zonas montañosas o la costa salvadoreña.
La ciudadanía debe ser consciente de que, desde el momento en que se anuncia una alerta, ya existe un grado de riesgo. Estas alertas se basan en proyecciones de posibles impactos, por lo que una vez que la advertencia pasa de verde a roja, la situación se vuelve más crítica. En ese contexto, es fundamental seguir las indicaciones oficiales para prevenir tragedias.