Un informe presentado se estima un 56% de probabilidad de impacto en el Caribe, 33% en la costa sur de Estados Unidos y un 26% en la costa este. Las cálidas temperaturas del Atlántico y el Caribe son el principal factor, aunque los científicos advierten incertidumbre debido a señales climáticas débiles.
En 2024, Estados Unidos sufrió cinco huracanes, entre ellos Helene y Milton, que causaron más de 250 muertes y daños por $120,000 millones de dólares, mientras tanto, el presidente Donald Trump propuso eliminar la agencia federal para la gestión de emergencias dejando la gestión de desastres naturales en manos de los estados.