Hacer manualidades junto a los niños no solo es una excelente manera de crear nuevas decoraciones para el hogar, sino también una actividad que fortalece los lazos familiares y estimula la creatividad. Este tiempo compartido tiene un impacto significativo en el desarrollo infantil, ya que ayuda a mejorar la motricidad. Además, estas actividades se convierten en recuerdos inolvidables.