Debido a que comparten algunos síntomas el lupus y la fibromialgia suelen confundirse, pero son enfermedades muy diferentes en su origen y tratamiento.
Algunos aspectos similares son el intenso dolor muscular y articular, fatiga crónica, problemas de sueño y dolores de cabeza, impactan la calidad de vida y son difíciles de diagnosticar, en su mayoría la padece mujeres jóvenes y adultas.
El lupus es una enfermedad autoinmune, el cuerpo se ataca a sí mismo, puede afectar articulaciones, generar erupciones en la piel, dañar órganos y se puede diagnosticar a través de exámenes.
Mientras que la fibromialgia es neurológica, causa dolor crónico en todo el cuerpo y fatiga, no tiene una prueba especifica, el diagnostico se hace a partir de los síntomas del paciente y puede tardar años.
El apoyo emocional es esencial, muchos pacientes enfrentan ansiedad tristeza o aislamiento, debido al dolor su rendimiento en el trabajo también podría cambiar, la comprensión en estos casos es fundamental y aunque en ambas enfermedades no hay cura definitiva, existen tratamientos que pueden ayudar a controlarlas.
La Fundación Lupus y el centro de psicología Althea, son instituciones que tienen un papel activo en el acompañamiento a los pacientes diagnosticados con lupus y fibromialgia, es por ello que el próximo 30 de mayo llevaran a cabo un conversatorio denominado escucha el dolor que tendrá la participación de tres profesionales de la salud y un paciente, para visibilizar estas enfermedades que cada vez más afectan a la población salvadoreña para asistir puede llamar al 7501-5137.