Trabajo es lo que sobra en este lugar, es el emprendimiento de los hermanos Hernández, dos jóvenes originarios de Lourdes Colón que buscan aprovechar el dÃa de los fieles difuntos que por cierto está a la vuelta de la esquina.
Los hermanos Hernández decidieron salir adelante en plena pandemia dedicándose al arte funerario. SofÃa se encarga del área administrativa y Rodrigo a la transformación de yeso, cemento, cerámica y mármol. A simple vista parece un negocio mas pero no es asÃ, los trabajos que aquà están marcados por la tecnologÃa.
En esta área, Rodrigo se ha convertido en el primer emprendedor salvadoreño que ofrece cruces y lápidas con códigos qr, hablamos de un modulo que al escanearlo desde teléfonos celulares o tablets permite recordar a la persona fallecida mediante una recopilación de fotografÃas y vÃdeos.
La idea de emprender les fue muy bien a los hermanos Hernández, dos jóvenes amantes de la tecnologÃa y el diseño que ante la falta de oportunidades decidieron aprovechar el talento que tienen para ofrecer arte funerario con montajes digitales.
Aseguran que ven su trabajo con gran responsabilidad por eso todos los dÃas tratan de dar lo mejor para que los clientes queden satisfechos porque saben que se trata del recuerdo que tendrán de un ser querido que ya partió de este mundo.