Llegar a esta cocina es un privilegio, así lo considero, es el área de trabajo de Marta Mundo, más conocida como la Niña Tita en Izalco, Sonsonate. Ahí donde la ven es la responsable de preparar como dicen muchos la mejor yuca de esta ciudad y vaya que lo es.
Miren que delicia, todo comienza a eso de las 7 de la mañana, la Niña Tita recibe más de 10 cabezas de cerdo cocidas y varias libras de menudos que de inmediato comienza a limpiar. Esto es cachete, orejas, de todo un poco diremos, cuando se tienen las piezas se llevan a estos peroles ¿para qué?, nada más y nada menos que para preparar los chicharrones de manera casera, tal como lo ve a fuego de leña.
En cuestión de dos horas la delicia esta de punto, casi una arroba de chicharrones tronadores que vuelven loco a cualquiera hablando de antojos, en serio, mire que cosas por Dios.
Es parte de los ingredientes, mientras tanto, lo principal es decir la yuca también está en peroles, se cocen 2 quintales, parte queda solo sancochada y otra se hace frita porque hay clientes que así la piden, pero no es todo, el trabajo aquí es por áreas y mientras la yuca está otras personas se encargan de preparar la ensalada, el chilito con limón y todo lo que llevan los platos de yuca que la Niña Tita prepara desde hace 54 años para sacar adelante a su familia.
La hora está llegando, al filo del mediodía todo debe estar listo porque las personas comienzan a llegar para encargar sus pedidos.
Ahora sí, es momento de sacar la venta, en la calle principal del barrio la asunción se siente el olor de esta delicia, es la Yuqueria Pénjamo, platillo que cientos de personas disfrutan en cada ocasión. Ahí está una vez más la Niña Tita, atrás quedo la cocina, en horas de la tarde lo único importante es preparar este platillo como solo ella sabe hacerlo.
La yuca es servida de manera tradicional, en hojas de bijao, lleva la porción elegida por el cliente, el curtido que es una delicia total, vegetales frescos, cebollita ácida y claro, el pedazo o pedazos de chicharrón de su elección, se antoja, si, no hay duda, toda una ricura de platillo. Es la famosa yuca de pénjamo, el negocio de Marta Mundo, una yuqueria que parece parte de la historia de este municipio ubicado en la zona occidental de El Salvador.
