Los altos costo de vida, de alimentos, alquileres dificulta para que personas puedan llegar a finales de mes de acuerdo con un análisis de necesidades de refugiados y migrantes y es que, para algunos sectores de la región, desde la pandemia, aun no se ha podido recuperar en temas económicos, ni de empleo, ni de salarios, lo que ha repercutido en los niveles de violencia y malestar social, aunque esta última ha presentado una disminución.
Los desastres naturales y los incendios forestales, así como inundaciones han impactado de manera negativa a países de Latinoamérica y el Caribe, de acuerdo con el Banco Mundial unas 17 millones de personas podrían verse afectadas con eventos como estos durante 2025 y casi seis millones de personas podrían estar en extrema pobreza para 2030, por la falta de agua, calor excesivo e inundaciones una de las alternativas para prevenir un mayor impacto es la apuesta a las energías verdes, que genere una mayor sostenibilidad ecológica.
Todo esto influye a la necesidad de personas de buscar mejores oportunidades, lo que implica migrar a otros países, por ejemplo, el flujo ha sido mayor en Venezuela que salen por Colombia y Brasil.
Los ecuatorianos también buscan salir de la escalada de violencia que se vive en su país y deciden emprender viaje, en su mayoría, a los Estados Unidos. De acuerdo con el servicio nacional de migración de Panamá a finales de 2023, más de 520,000 personas cruzaron ese país de forma irregular a través del Darién mientras otros toman vuelos desde Sudamérica a Nicaragua y El Salvador debido a que los requisitos de entrada son más fáciles.