Exigen al gobierno una reforma agraria justa y que se retome la propuesta de hambre cero, que sea integral y sustentable para erradicar el hambre en El Salvador, entre las demandas hechas están la valoración social y dignificación campesina, agroecología para la soberanía alimentaria libre de químicos tóxicos, el uso de la tierra para todos los agricultores, precios accesibles de los alimentos y la restauración de los ecosistemas.