La noche del 21 de enero el Ministerio de Salud de Nicaragua, confirmó el fallecimiento de Carlos Mauricio Funes Cartagena, quien fungió como presidente de El Salvador durante el periodo de 2009 al 2014. Tras ser atendido por dolencias crónicas y que lo mantenían hospitalizado.
Funes fue el primer presidente de izquierda, llegando al gobierno bajo la bandera del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, este partido político lamentó la muerte del exmandatario y destacó su trabajo, entre ellos, la entrega de útiles escolares, uniformes y Ciudad Mujer.
Funes gano simpatía en la población durante su trayectoria como periodistas, lo que hizo que el FMLN lo seleccionara para candidato de la presidencia de la República, ganando por un alto margen a su contrincante Rodrigo Ávila de Arena.
Al finalizar su periodo fue acusado por la Fiscalía General de la República por delitos de corrupción, huyendo a Nicaragua en 2016 y recibiendo la nacionalidad de dicho país luego de tres años.
Sin embargo, el exmandatario dejó cuentas pendientes con la justicia salvadoreña.
Funes tenía una orden de captura pendiente por el caso de Saqueo Público donde se le imputa lavado de dinero de más de 351 millones de dólares. Era acusado por supuestos sobornos al exfiscal general, Luis Martínez, por el caso Corruptela; además de estar vinculado al caso de El Chaparral y el caso de Tregua con Pandillas.
Al ser ciudadano de Nicaragua no podía ser extraditado al territorio salvadoreño para responder ante la justicia, por lo que la Asamblea Legislativa con una reforma al código penal, permite enjuiciar a reos en calidad de ausentes. Funes ya había recibido una pena de 28 años de cárcel por tres de sus casos.
En los últimos años, Mauricio Funes, continuó emitiendo sus opiniones en entrevistas virtuales y a través de su cuenta de X, desactiva luego del anuncio de su muerte.