En total son 200 fusiles de asalto Arad con sus respectivos cargadores y portafusiles, además 400 chalecos y 100 cascos balísticos, con un valor que supera los $543,000 dólares.
De acuerdo con el ministro de la Defensa, Francis Merino Monroy, esto es para fortalecer el trabajos que se realizan en la llamada guerra contra las pandillas que mantiene el gobierno desde hace tres meses con la aprobación del régimen de excepción.