Estos equipos entregados a través de la Administración de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos, tienen un valor aproximado de 135,000 dólares y serán utilizados en el aeropuerto internacional de El Salvador como una herramienta clave para garantizar la seguridad permitiendo la detección rápida y precisa de rastros de explosivos en equipaje, carga y personas.
Este equipo de última generación también ayudará a prevenir posibles actos terroristas, asegurando que se mantengan altos estándares de protección.