El Salvador ha ofrecido a Estados Unidos su sistema carcelario para que los convictos estadounidenses, o de cualquier país, puedan cumplir sus condenas en territorio salvadoreño.
Esta propuesta, que incluye una tarifa baja, busca ser un mecanismo para sostener el sistema penitenciario del país.
La tarifa, que sería relativamente baja para Estados Unidos, sería significativa para El Salvador y permitiría mantener de manera sostenible todo el sistema penitenciario.