Las autoridades panameñas atribuyen la caída a las medidas de seguridad más estrictas implementadas por el gobierno del presidente José Raúl Mulino, que asumió el 1 de julio y que incluyen, entre otras, el cierre de tramos del Darién con alambre de púas y repatriaciones con apoyo de Estados Unidos.
Entre enero y el 25 de septiembre, 259,712 migrantes llegaron a Panamá a través del Darién, un 35% menos en comparación con el mismo periodo del año pasado, informó el jefe de la brigada oriental del servicio nacional de fronteras.
El 68 % de aquellos migrantes proviene de Venezuela.