Nueve voluntarios del Cuerpo de Paz de los Estados Unidos regresaron al país después de ocho años de pausa en las operaciones debido a la delincuencia que vivía El Salvador. Ellos vienen a cumplir un año de servicio apoyando a las comunidades en diferentes proyectos.
Estos jóvenes ya brindaron asistencia humanitaria en otros países como Colombia, Bolivia y Costa Rica. Su retorno a El Salvador implica un nuevo compromiso afirma su directora.
Para el embajador norteamericano, el trabajo que estos jóvenes desempeñarán también tiene otro significado.
Desde su creación en 1962, más de 2,300 voluntarios del Cuerpo de Paz han trabajado en pueblos y comunidades, apoyando en proyectos de salud, agricultura, desarrollo económico comunitario y desarrollo juvenil.