En la Asamblea Legislativa se aprobó la ley especial de protección y bienestar animal, un marco jurídico que brinda obligación y potestad a las alcaldías para intervenir en caso exista algún tipo de maltrato animal y que les permite incluso retirar a los animales de compañía, como perros y gatos para entregarlos a hogares temporales u organizaciones de rescates de animales puedan asumir su cuidado.
A raíz de lo aprobado, se creará el instituto de bienestar animal para que se encargue de ejecutar la ley.
La ley contempla tres tipos de faltas:
Faltas leves: con multa entre 1 y 3 salarios mínimos, que incluye no identificar animales de compañía, comprar perros y gatos, o no brindar atención médica.
Faltas graves: con multas entre 4 y 6 salarios mínimos, entre estas que los animales no tengan espacio adecuado, evadir su vacunación y tener conflictos vecinales por trato inadecuado.
Faltas muy graves: de 7 a 10 salarios mínimos, como el sacrificio de animales de compañía, no proveer agua y alimento, abandonar animales, zoofilia, compra y venta no autorizada, incluyendo plataformas digitales, entre otros.
Esta ley fue trabajada con apoyo de activistas que velan por los derechos de animales.
Según la ley, las sanciones impuestas podrían reemplazarse por trabajo de utilidad pública, acorde al monto de la multa.